Las esmeriladoras poseen potentes motores con cojinetes a bolas y estancos de polvo por medio de una carcasa de fundición maciza.
Estas herramientas disponen de cubiertas protectoras de metal fundido y cristales ajustables de protección contra chispas.
Además, posibilidad de interruptor de conexión y desconexión protegido contra el polvo.